La Asociación Derecho y Democracia de Sevilla concede desde hace años el premio Plácido Fernández Viagas a quienes han destacado por su labor en defensa de las libertades públicas y los derechos fundamentales recogidos en nuestra constitución y [que] supongan una consolidación de los principios democráticos establecidos en nuestra Carta Magna.
Este año han decidido entregarle el premio a Cecilio Gordillo Giraldo, como uno de los principales impulsores de las acciones llevadas a cabo a favor de la recuperación de nuestra historia reciente y del conocimiento de la represión y las secuelas de la dictadura franquista, apoyándose en la memoria de los que lucharon por estos mismos principios con la firme convicción de luchar contra el olvido, por la defensa de su dignidad, mirando hacia un futuro de paz y respeto de los derechos humanos.
Ya he hablado aquí otra vez de Cecilio, extremeño en Andalucía, responsable del grupo de trabajo “Recuperando la Memoria de la Historia Social de Andalucía” de la Confederación General del Trabajo de Andalucía, impulsor de la web www.todoslosnombres.org. Y anarquista.
No suelen recibir los anarquistas muchos homenajes. Éstos los suelen dar las instituciones y ni a los anarquistas les gustan las instituciones ni a las instituciones les gustan los anarquistas. La excepción aquí no son sólo los inapelables valores de Cecilio, sino la limpia trayectoria de la asociación de juristas Derecho y Democracia de Sevilla. El jueves 31 de mayo (antiguo convento de Santa María de los Reyes, calle Santiago, 33, Sevilla, 20 horas) Cecilio se convertirá en uno de los pocos anarquistas galardonados en España. Nunca con tanta justicia. Me gustaría estar con él pero no puedo. Mañana a esa misma hora hablo de la guerra civil en Zafra en el Ateneo de Badajoz. ¡Enhorabuena, Cecilio!
Este año han decidido entregarle el premio a Cecilio Gordillo Giraldo, como uno de los principales impulsores de las acciones llevadas a cabo a favor de la recuperación de nuestra historia reciente y del conocimiento de la represión y las secuelas de la dictadura franquista, apoyándose en la memoria de los que lucharon por estos mismos principios con la firme convicción de luchar contra el olvido, por la defensa de su dignidad, mirando hacia un futuro de paz y respeto de los derechos humanos.
Ya he hablado aquí otra vez de Cecilio, extremeño en Andalucía, responsable del grupo de trabajo “Recuperando la Memoria de la Historia Social de Andalucía” de la Confederación General del Trabajo de Andalucía, impulsor de la web www.todoslosnombres.org. Y anarquista.
No suelen recibir los anarquistas muchos homenajes. Éstos los suelen dar las instituciones y ni a los anarquistas les gustan las instituciones ni a las instituciones les gustan los anarquistas. La excepción aquí no son sólo los inapelables valores de Cecilio, sino la limpia trayectoria de la asociación de juristas Derecho y Democracia de Sevilla. El jueves 31 de mayo (antiguo convento de Santa María de los Reyes, calle Santiago, 33, Sevilla, 20 horas) Cecilio se convertirá en uno de los pocos anarquistas galardonados en España. Nunca con tanta justicia. Me gustaría estar con él pero no puedo. Mañana a esa misma hora hablo de la guerra civil en Zafra en el Ateneo de Badajoz. ¡Enhorabuena, Cecilio!