A veces olvidamos el valor de la bondad. Me refiero a la bondad sin atributos. Algunos vamos por la vida con la cabeza llena de ideas y con el gusto ávido de exquisiteces intelectuales, y olvidamos la bondad sencilla de la gente común.
Hoy me he culpado de ese descuido al encontrarme a un buen hombre: Simón Sayago Ladera, utillero del polideportivo de Zafra y esquilador de mulas, sesenta y cinco años, natural de Feria. La forma en que me ha saludado ha sido la expresión de la bondad. Él y yo sólo nos conocemos del trato esporádico de quienes viven en la misma ciudad, de saber yo de sus afanes por la Virgen de su pueblo y de saber él de mis cosas de la guerra civil. He hablado con él varias veces de esos y otros asuntos. Es un buen hombre y un gran profesional: ya digo, de los pocos esquiladores "artísticos" que quedan. Y hoy me ha saludado con un afecto en desuso. Primero con los ojos; después, se ha acercado; finalmente, me ha puesto las manos en los hombros y me ha dicho: “me alegro mucho de verte”. Así, sincera y sencillamente.
Lo dicho: la bondad
(Le blanc-seing, René Magritte, 1965)
Hoy me he culpado de ese descuido al encontrarme a un buen hombre: Simón Sayago Ladera, utillero del polideportivo de Zafra y esquilador de mulas, sesenta y cinco años, natural de Feria. La forma en que me ha saludado ha sido la expresión de la bondad. Él y yo sólo nos conocemos del trato esporádico de quienes viven en la misma ciudad, de saber yo de sus afanes por la Virgen de su pueblo y de saber él de mis cosas de la guerra civil. He hablado con él varias veces de esos y otros asuntos. Es un buen hombre y un gran profesional: ya digo, de los pocos esquiladores "artísticos" que quedan. Y hoy me ha saludado con un afecto en desuso. Primero con los ojos; después, se ha acercado; finalmente, me ha puesto las manos en los hombros y me ha dicho: “me alegro mucho de verte”. Así, sincera y sencillamente.
Lo dicho: la bondad
(Le blanc-seing, René Magritte, 1965)
Vivir esos momentos son todo un regalo de la vida, amigo. Debes estar muy contento, por lo menos tanto como yo al leerte contarlo. En el fondo, y la forma, los hombres somos buenos, todos, no condeno a nadie, a nadie... Pero, como dicen los budistas, que son los que más fino han hilado en esto, la ignorancia de cada uno de nosotros, los miedos y odios diversos, que nos enredan, nos hacen desbarrar, ser pobres diablos en manos de esas tres patas para entender compotamientos: miedo, ignorancia y odio. Con toda mi bondad. Gracias.
ResponderEliminarSin desperdicio el post (más para quien conoce a Simón Sayago) y excepcional la ilutración de Magritte.
ResponderEliminarSaludos
Lectura de la Placa-Homenaje entregada a Simón, el 29 de septiembre de 2006, coincidiendo, en su despedida, con la pequeña celebración que le brindó la FMDeportes Zafra, junto a sus compañeros de trabajo.
ResponderEliminarA
SIMÓN SAYAGO LADERA,
en el día de su jubilación.
Por su implicación en el trabajo y su contribución al crecimiento
y mejora de este Servicio Municipal de Deportes, y, sobre todo,
por sentirse parte de nuestra familia no sólo profesional y deportiva,
sino también, y lo que es más importante, personal y afectiva.
Con nuestros mejores deseos.
Guarda siempre un rinconcito en tu memoria para todos nosotros
¡ Aquí tendrás siempre tu segunda casa ¡
Zafra, Septiembre de 2006
FUNDACIÓN MUNICIPAL de DEPORTES – EXCMO. AYUNTAMIENTO de ZAFRA
Es un blog interesante y bien surtido de anécdotas servibles y lecturas deliberativas.
ResponderEliminarBuena labor, ¡enhorabuena!
Gracias a tu tiempo y talento he pasado un rato muy provechoso en tu blog.
Cuidate bueno,
Tuyo,
Viktor Gómez